ZAPATOS PERSONALIZADOS AL DETALLE
Hoy en día la creatividad es un valor que domina en las bodas, por ello no es de extrañar que la mayoría de las parejas se decanten por personalizar y diseñar los detalles más significativos de su boda.
Son muchas las novias que buscan inspiración a través de Google y redes sociales para encontrar lo que les interesa.
Así fue como María Isabel me encontró. El pasado 13 de diciembre recibí el primer email que daría comienzo a una larga sucesión de ellos. En él me explicaba su deseo de tener unos zapatos pintados a mano y personalizados, pero como era de esperar tenía muchas dudas.
Tras algunas aclaraciones, en el siguiente correo me informa de que la boda no sería hasta el 1 de julio por lo que a mi parecer había tiempo de sobra… o eso creía yo hasta que empecé a ver todas las indicaciones y referencias sobre el diseño. Casi me vuelvo loca -de contenta también-.
Me dejaste claro que sería una decoración únicamente a línea negra, con muchos dibujos pero que al no llevar color sería algo más sencilla de hacer. Querida María Isabel, de sencilla ¡nada! (todo esto desde el cariño).
Pero acepté el reto, me parecía un proyecto realmente espectacular y una forma de probarme a mí misma, de demostrar que con esfuerzo y pasión se hacen grandes cosas.
Llego enero y por fin sus zapatos de novia en mi atelier. Era el momento de comenzar con el intricando boceto. La verdad es que preparé varios patrones por si alguno de los elementos no me encaja y tenía que repetirlo, pero me fue fácil – que no rápida – hacer una composición que se adaptara a la forma del zapato.
Tras enviar el diseño de la decoración y ver su gran acogida…
“solo puedo decir, ME GUSTA, ME ENCANTA, ES CHULÍSIMO, ESTOY ASOMBRADA, sabía que confiar en ti era muy bueno.”
Palabras así, animan a hacer que cada día, dedicarme a esto me guste más.
Boceto aprobado, llega el momento de pintar a mano. Iban a ser largos y duros días de trabajo, manteniendo un pulso firme y la mirada fija en cada pequeño detalle, nada podía escaparse a nuestra atención.
Creo que una de las partes más difíciles para mí, fue la suela de los zapatos. En una de ellas debía incluir el nombre de las primas, pues era su regalo de boda. Y entre la falta de espacio para maniobrar, el tipo de material y demás… no fue sencillo obtener una caligrafía bonita.
Marzo comienza, los zapatos de boda están listos y es hora de mandarlo a Albacete, su dueña los espera.
“Ya tengo los zapatos, son mucho más bonitos que en las fotos, los detalles con blanco y gris hacen que el negro resalte todavía más, puestos son chulísimos”
“…mimas cada detalle de tus trabajos, eso dice mucho de ti y te convierte en una gran profesional”
No conozco otra forma de trabajar, con pasión y tratando a la persona que confía en ti como si fueras tú mismo.
¡¡¡María Isabel, esperamos muchas fotos más!!! Gracias por confiar en mi trabajo.